LA FOTO DE LA SEMANA

Mariposa. La foto de Carole Mills Noronha se titula “El lugar al que va”. La fotógrafa australiana retrató a su padre, 90 años, enfermo de demencia vascular y Alzheimer, una de las veces que pudo visitarlo tras la pandemia. Como no podía salir con él le trajo algo del exterior. La fotografía describe una doble fragilidad, dentro y fuera del tarro, es el tercer premio en la modalidad de retratos de Lensculture, la revista sobre foto contemporánea. Por si quieren ojearla, hagan clic aquí ⬇️.
La imagen me recuerda la gala del Met. En un momento les explico lo del Met. Pero antes…

Después de una semana sin foto de la ídem, voy a por todas. La semana pasada llegaron unos amigotes desde Bozeman, Montana, USA, y les saqué a pasear. Fuimos a escuchar a la Escolanía de Montserrat, hicimos el turista por todas las iglesias que encontrábamos y subimos alguna montaña. Así que hice novillos de mi sección. Dos semanas antes, mi sección había hecho novillos de mí. Empate en Las Gaunas.

La Met. Definición corta: la Met Gala es una escalera para que se luzcan las Kardashian.
Definición larga: la Met Gala es una escalera que monta la revista Vogue para que se luzcan las Kardashian con ropa temática.
O sea: la Met Gala es un fiestorro que organiza Vogue para que luzcan modelo “los que tienen que estar” ➡️. Verbigracia, las Kardashian. Y en el que nadie sabe qué sucede.
O sea 2: la Met Gala es un tarro de melocotón en almíbar con mariposas dentro al que usted (creo) y yo (estoy seguro) no vamos a acceder. ¿Lo ven? Al final he llegado.
Tal vez, tal vez, a Zienna Sonne, mi corresponsal en Florida que tiene tantas curvas como todas las Kardashian juntas la inviten algún día. Como soy su jefe, igual me llega de acompañante ¡Yupi!
Desvarío. Voy a la Met. La gran triunfadora fue, nunca lo dirían, Kim Kardashian que se presentó durante 10 minutos con el mismo vestido que llevaba Marilyn Monroe cuando le deseó un feliz cumpleaños ▶️ a JFKennedy. Luego, se enfundó una réplica. La co-anfitriona, Blake Lively, lo hizo mejor: su vestido, por arte de birlibirloque, cambió en mitad de la escalera ➡️. La gente -como mi banco- no daba crédito ▶️. Ríanse, por caridad, que he hecho mi tradicional chiste malo.
Los vestidos que debían representar la época dorada de NY, NY, iban desde el de Nicki Minaj ➡️ vestida de Barbie Burberry hasta el de Hillary Clinton que llevaba bordados nombres de mujeres que admira. Aunque, para bordados, lo que se dice bordados, el del nuevo alcalde de Nueva York, Eric Adam. Al final, champán a gogó en la fiesta-tras-la-fiesta de Tom Ford ➡️ a la que usted (creo) y yo (estoy seguro) tampoco fuimos invitados.
En el mismo NY, NY, otros vecinos se inventaron la People’s Ball. Una alternativa a la que usted (creo) y yo (estoy seguro) sí podríamos ir ➡️.

Mientras tanto, en el mundo… Sucedía esto ➡️, esto ➡️, esto y esto ➡️.

Final bonito. El papá de Carol, salió luego al jardín, abrió el tarro y la mariposa voló.

Y, ahora, aquí, La Foto-aprovechemos-las-zonas-verdes de la Semana. Sean buenos.

Al lado de algunos enlaces añado los signos ➡️ o ⬇️. Es para advertirles que hay varias fotos y que pueden deslizarse por ellas. O un vídeo ▶️.