El nuevo Gran Líder. Foto: Noel Celis / AFP (@afpphoto)
LA FOTO DE LA SEMANA
Mao, Deng y, ahora, Xi
Jinping. China estrena un tercer Padre de la Patria que diríamos aquí: Xi Jinping. Con los nombres chinos siempre me hago un lío y no sé cuál es el apellido. Seguiré la Wikipedia: Xi.
Bueno, pues Xi, que en la foto del fondo de la foto sale con una chaquetilla “Mao” es el tercer Gran Líder. Sus predecesores son Mao Zedong que inventó el “cuello Mao” y Deng Xiaoping que inventó la frase que le molaba a Felipe González: “No importa si el gato es negro o blanco; mientras pueda cazar ratones, es un buen gato”. Pues el Partido Comunista Chino que lidera… ¡Cáspita! ¡Si es el bueno de Xi! Le ha puesto por las nubes y por los murales de su museo. En el panegírico se han olvidado de los campos de concentración, la represión en Hong Kong o la posible invasión de Taiwán ➡️. O lo del coronavirus. Ya saben cómo va esto de los panegíricos ¿No?
Pinche aquí si quiere ver la foto-alternativa de la semana.
Todo vuelve. Vuelve la Maratón de Nueva York ➡️. Y también Sexo en ídem porque vuelve Sarah Jessica Parker. Por cierto, el apartamento de Carrie Bradshaw, la prota, se alquila a 23 pavos la noche.
Quien no vuelve de Nueva York es Zienna Sonne. Aquí la tienen, luciendo cintura. La NASA vuelve al espacio ➡️ y en la India, vuelve otro festival: el de esta semana lleva por título Chhath Puja ➡️ y ha servido para, entre otras cosas, que la gente se bañe en uno de los ríos más contaminados del mundo, el Yamuna ➡️, que abastece a Nueva Dehli y no, eso blanco no es nieve. En otra parte de la India, en Chennai (lo que usted y yo conocimos como Madrás) han vuelto las lluvias y a Venecia le ha vuelto su tradicional marea de otoñal ➡️. Hay quien no volverá a casa y, por lo que se ve, no vuelve el pelopantén.
Va de sonrisas. La premio Nobel de la Paz, Malala Yousafzai, se ha prometido. Unas niñas arrancadas de sus hogares sonríen en Kabul. Un niño sonríe en la frontera de Bielorusia y Polonia. Y eso que, en el otro lado, le espera esto. En Polonia adoran a los niños. Tanto, que los médicos dejaron morir a Izabela, 30 años, por no abortar a su bebé moribundo. Protestas. Me he quedado sin sonrisa.
La felicidad ▶️ (suban el volúmen) debería ser una cosa así de simple.
Y, ahora, aquí ➡️, Las Fotos–suerte-que-he-traído-el-paraguas de la Semana. Sean buenos.